La etapa de recría va desde el destete hasta los 70 días de edad y tiene como objetivo principal producir lechones de calidad. Es una etapa de transición entre la leche materna y un alimento de alta complejidad. Se realiza por etapas utilizando varias dietas para adaptar gradualmente el aparato digestivo del lechón y favorecer la salud intestinal y el equilibrio bacteriano. Se deben lograr altos consumos de alimento en los primeros días posdestete, para lo cual además de un alimento preiniciador de alta calidad se deben controlar las medidas de manejo como ambiente, temperatura, ventilación, densidad, espacio, etc. Los preiniciadores de alta calidad logran un peso óptimo en un menor número de días y reducen los días al mercado y consumo de alimento en la etapa de engorde, lo que permite lograr un ahorro económico importante. Son dietas son altamente rentables.

Creep Feeding: Alimentación bajo la madre

Es la estrategia de manejo que consiste en ofrecer alimento especializado para lechones durante la etapa de lactancia. Mediante esta técnica se pretende no solo que el lechón tenga un mejor y más rápido contacto con el alimento sólido a edades tempranas, sino que también se espera un precoz desarrollo enzimático (amilasas, lipasas y proteasas) debido al contacto con nutrientes no presentes en la leche materna (adaptado de Wattanakula y col. 2004). Al no brindarles a los lechones un alimento en maternidad, su cuerpo reaccionará de manera negativa al destete, provocándoles inflamación y diarreas que los llevarán a la deshidratación y posterior pérdida de peso.

Diversas investigaciones han demostrado de manera consistente que el desempeño posdestete de los lechones que consumen alimento bajo la madre es significativamente mejor. Mavromichalis (2016) indicó que el consumo de alimento de lechones destetados entre 15 y 18 días pocas veces superan los 100 g/lechón durante la lactancia, mientras que, en lechones destetados con más de 25 días se alcanza un consumo de 500 g/animal.

Sola (2013) indicó que consumir o no alimento bajo la madre está relacionado con el peso de los lechones y la posición que ocupan en la ubre. Los lechones que lactaron de las tetas posteriores, donde se observa menor producción de leche, presentaron un mayor porcentaje de consumo (en su mayoría animales pequeños).

Otro factor que influye sobre el consumo de alimento es la temperatura ambiente. Renaudeau y Noblet (2011) encontraron que el consumo de alimento en animales alojados en salas con temperatura de 29ºC fue 67% superior a las camadas criadas a 20ºC; 388 g/día versus 232 g/día, respectivamente.

Preiniciador, concepto nutricional

Para los nutricionistas existe la necesidad de hacer frente a los requerimientos de un animal muy joven y con un sistema digestivo e inmunitario inmaduros. Cobra vital importancia la selección de materias primas y su porcentaje de inclusión en la dieta. Para lograrlo es imprescindible conocer al animal tanto por “fuera” como por “dentro” y manejar dietas que apliquen adecuados conceptos nutricionales, fisiológicos y sanitarios.

Un preiniciador es un alimento nutritivo, palatable, altamente digestible y libre de factores anti nutricionales. Su función es estimular el consumo de alimento para que el gorrino aumente su consumo de energía total. Representan aproximadamente el 5% del consumo total del alimento del cerdo (figura 1), sin embargo, su impacto en la producción puede llegar a ser muy significativo. image_1

Figura 1.

Durante la lactancia, el sistema enzimático del lechón está adaptado para digerir proteínas, lactosa y lípidos secretados en la leche de la cerda. Sin embargo, hasta los 21 a 28 días de edad su sistema digestivo no produce cantidades apreciables de lipasas, amilasas y otros enzimas que degradan los nutrientes contenidos en materias primas de origen vegetal (Cunningham, 1959). Es por ello, que al momento de formular las dietas posdestete, se debe seleccionar e incluir insumos altamente digestibles, además de, considerar altos niveles de aminoácidos digestibles y adición de enzimas exógenas (complejos enzimáticos).

Desarrollo del sistema enzimático del lechón

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Previo al destete, las vellosidades intestinales son largas, bien estructuradas, y muy eficientes en la absorción de nutrientes. Sin embargo, en el momento del destete, su longitud se reduce casi a la mitad y aumenta la profundidad de las criptas (Hampson, 1986; Miller et al., 1986; Kelly et al., 1991; Pluske et al., 1991). Las dietas para gorrinos deben ser de alta digestibilidad para evitar la llegada de un exceso de sustrato fermentable al intestino grueso y deben ir exentas de sustancias que puedan agravar este hecho (tales como glicina o conglicinina contenidas en las harinas de soya). image_1   Características de un preiniciador

1. Es una dieta nutritiva, palatable y altamente digestible. La alta palatabilidad contribuye a incrementar el consumo de alimento. La alta digestibilidad se logra asegurando el uso de ingredientes especiales a través de un estricto control en el proceso de producción con atención especial en la granulometría de la materia prima y calidad de pellet (pellet suave pero durable, bajo en finos, adecuada dureza, etc.)

2. Ofrece un programa rentable, por lo que, es preciso calcular la rentabilidad de los preiniciadores con datos reales de granja.

3. Uso de tres o más fases alimenticias con cambios de alimento de manera gradual. Se recomienda ir de una fase a otra combinando ambos alimentos durante tres días.

Por ejemplo:

· Primer día: 75 % fase actual y 25 % fase nueva

· Segundo día: 50 % fase actual y 50 % fase nueva

· Tercer día: 25% fase actual y 75 % fase nueva

· Cuarto día: 100% fase nueva

4. Alimentación por presupuestos por lechón, de esta manera aseguramos la conversión alimenticia. Se debe respetar y asegurar el cumplimiento del presupuesto de alimentación recomendado por el programa de preiniciadores que está utilizando. El lechón los primeros 10 días posdestete tiene la mejor conversión alimenticia (CA) de todo su crecimiento siendo muy cercana a 1.00, en contraste con casi 3.00 de CA al alcanzar los 100 Kg.

El uso de preiniciadores de alta calidad incluso antes del destete es fundamental para que el gorrino pueda expresar todo su potencial genético.

Importancia de un alimento peletizado

Es fundamental utilizar las primeras dietas en forma peletizadas para lograr una buena disponibilidad de alimento y evitar desperdicios, además de, aprovechar la excelente capacidad de conversión del lechón al destete.

La industria avícola y porcina concluyeron que el mayor costo del peletizado (comparado con harina), es más que compensado por el mejor desempeño de los animales. Las investigaciones en Europa y EE. UU. coinciden en que, en los cerdos al destete, el peletizado mejora la Ganancia Diaria de Peso (GDP) y la Conversión Alimenticia (CA) en un 9%. Este 9% significa una mejora considerable porque puede significar unos 3 días menos para alcanzar el mismo peso, pero con 3 días menos de alimento (Águila R., 2011).

El uso de alimento peletizado en los preiniciadores es determinante para lograr un ahorro en consumo de alimento lo cual nos lleva a incrementar la rentabilidad de la granja.

Efecto en la variación de peso

Con un programa de preiniciadores de alta calidad se logra una nutrición más precisa, lo que permite controlar la variación de peso del lote logrando un mayor número de animales con un peso óptimo al final de la etapa.

Las prácticas de manejo buscan minimizar la influencia ambiental para que se manifieste el potencial genético del animal; sin embargo, aún bajo condiciones de muy buen manejo, el cerdo solo alcanza el 80% de su potencial de crecimiento (Patience et al., 2001). Conocer el grado de variación de pesos a cierta edad permite aplicar manejos especiales en los animales. Al identificar un lote de cerdos que tienen un mayor riesgo de morbilidad, mortalidad u otros problemas, es posible focalizar una atención especializada en dichos cerdos para mejorar su eficiencia productiva, por ejemplo, proporcionar una temperatura más elevada a los corrales de cerdos más pequeños o bien, retrasarles el cambio de etapa alimenticia.

Resultados en la rentabilidad

El porcicultor debe tener en cuenta cuánto dinero invertirá por lechón en un alimento preiniciador y cuánto dinero espera recibir. Decidir la compra de una marca de alimentos preiniciadores sin evaluar su rentabilidad con datos reales de granja puede derivar en una significativa pérdida de dinero.

Los alimentos preiniciadores son rentables porque son consumidos precisamente en la etapa donde la fisiología del cerdo es más eficiente para convertir alimento en peso vivo. Los preiniciadores de alta calidad demuestran su eficiencia al lograr un mayor incremento de peso en un menor tiempo, lo que conlleva a un interesante ahorro económico, y esa es la verdadera rentabilidad con el uso de preiniciadores.

Autora: Ing. María Lourdes Solano – Asesor Técnico Comercial MONTANA