Relación entre la nutrición y el rendimiento reproductivo de las vacas

2024-08-07 23:02:37 | Ganadería

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Relación entre la nutrición y el rendimiento reproductivo de las vacas

El rendimiento reproductivo de las vacas influye mucho en la producción de leche y, por ende, en la rentabilidad de una explotación lechera. En un estudio realizado en Estados Unidos, se han observado mejoras en las tasas de preñez a los 21 días de las vacas lecheras.  

Estos avances se deben a una mejor selección genética para características de fertilidad, programas mejorados de manejo reproductivo, mayor comodidad y mejor gestión de las instalaciones para las vacas, así como programas nutricionales ajustados para vacas secas y en lactancia. 

En un seminario web de DAIReXNET, el Dr. Milo Wiltbank de la Universidad de Wisconsin-Madison analizó el papel que desempeña la nutrición en la mejora de la eficiencia reproductiva del ganado vacuno. 

¿La nutrición afecta el rendimiento reproductivo de las vacas? 

Según el Dr. Milo Wiltbank, el rendimiento reproductivo de las vacas está influenciado por la genética, la fisiología asociada con el manejo reproductivo, el manejo general de las vacas como el confort animal y la nutrición.  

Todos estos factores afectan el rendimiento reproductivo, por lo que no debemos subestimar el papel que tiene cada área en la influencia sobre este rendimiento. En otras palabras, una solución mágica, como suministrar un aditivo o ingrediente en particular para el alimento, por sí sola no mejorará la reproducción.  

La implementación de todos los aspectos es importante para lograr un rendimiento reproductivo excelente. 

El Dr. Wiltbank analizó cuatro períodos críticos en los que la nutrición afecta el rendimiento reproductivo. Estos períodos son: 

  • Período seco cercano al parto (dentro de las 3 semanas antes del parto), 
  • Las 3 semanas posteriores al parto 
  • Una semana antes de la inseminación artificial (IA por sus siglas en inglés) 
  • Embarazo prematuro. 

Para cada uno de estos períodos de tiempo, el Dr. Wiltbank describió en su seminario web ejemplos de cómo la nutrición o los cambios en el estado nutricional podrían afectar el rendimiento reproductivo. Por ejemplo: 

  • Período seco cercano al parto: Los programas nutricionales que previenen deficiencias de nutrientes o un exceso de alimentación energética pueden mejorar el rendimiento reproductivo. El Dr. Wiltbank revisó un estudio de investigación donde vacas secas cercanas al parto deficientes en vitamina E fueron inyectadas con esta vitamina. Las vacas cercanas al parto inyectadas con 1000 UI de vitamina E tuvieron una menor incidencia de retención de placenta, mortinatos y pérdida de embarazo del día 31 al día 62 en comparación con las vacas secas cercanas al parto deficientes en vitamina E. 

Este ejemplo ilustra cómo una suplementación específica puede mitigar problemas como la retención de placenta y mejorar la salud reproductiva en vacas durante el período seco cercano al parto. 

En otro estudio (que resume 7 estudios de investigación), el Dr. Wiltbank explicó cómo diferentes dietas alimenticias para vacas secas cercanas al parto afectan su rendimiento reproductivo.  

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Comparó una dieta de baja energía con una de alta energía y encontró que las vacas en la dieta de baja energía perdieron menos condición corporal al inicio de la lactancia y tardaron menos tiempo en quedar preñadas después del parto. Esto resalta la importancia de la nutrición antes del parto para mejorar el desempeño reproductivo después del parto. 

  • Vacas recién paridas: La condición corporal en el momento de la inseminación artificial y los cambios en los valores de condición corporal (BCS) dentro de los primeros 21 días después del parto pueden afectar el rendimiento reproductivo. El Dr. Wiltbank compartió los resultados de un estudio de investigación en el que las vacas fueron sincronizadas y luego inseminadas artificialmente. En aquellas vacas sincronizadas con Ovsynch, la probabilidad de concepción fue menor para las vacas con una BCS menor a 2,75 en el momento de la inseminación artificial en comparación con las vacas con un BCS de 2,75 o mayor. Con el uso de Ovsynch doble en comparación con solo Ovsynch, las vacas con un BCS menor a 2,75 tuvieron una mayor probabilidad de quedar preñadas, pero las tasas de preñez fueron aún más bajas que las vacas con un BCS más alta en el momento de la inseminación artificial. 

El Dr. Wiltbank también mostró datos que ilustraban que los cambios en los BCS dentro de los primeros 21 días después del parto pueden afectar la calidad del embrión y la fertilidad general.  

Las vacas que aumentaron su BCS dentro de los primeros 21 días de producción de leche tuvieron mayores tasas de preñez (78 % de preñeces/IA) en comparación con las vacas que mantuvieron su BCS (36 %) o la perdieron (23 %).  

Estos investigadores demostraron que la calidad embrionaria temprana se redujo en las vacas que perdieron más BCS dentro de los primeros 21 días de producción de leche, lo que explica las reducciones observadas en las tasas de preñez 70 días después del apareamiento. 

  • Una semana antes de la inseminación artificial (AI) y en el inicio del embarazo: Aunque se necesita más investigación, parece que las dietas mal equilibradas, por ejemplo, la alimentación con grandes cantidades de carbohidratos, pueden afectar negativamente al rendimiento reproductivo. Mientras que la alimentación con determinados tipos de grasas o aminoácidos puede afectar positivamente al rendimiento reproductivo.  

Un estudio muy interesante que presentó el Dr. Wiltbank implicó equilibrar las dietas para el aminoácido metionina, utilizando un producto protegido ruminalmente. La metionina está involucrada en la regulación de la expresión genética por la cual “los genes se activan y desactivan” y, como resultado, el desarrollo del embrión puede verse afectado.  

En un estudio donde se suplementó metionina, los investigadores observaron una reducción en las pérdidas de embarazo desde los días 28 hasta el día 61 en vacas maduras, pero no en novillas de primera lactancia. Como mencionó el Dr. Wiltbank, se necesitan más estudios, pero los resultados muestran promesa en la búsqueda de métodos para reducir las pérdidas embrionarias tempranas durante la gestación. 

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Fuente: Afs.ca 

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